martes, 31 de mayo de 2016

Muerte y nacimiento

Imagen de Internet de Beksinski, artista polaco
“Parece como si la muerte estuviera meciendo a un recién nacido…”.*

Yo soy la mano que te mece para que duermas.
También soy el sueño que acompaña a los que duermen,
El miedo o el deseo de los que van a dormir;
Tu más fiel compañera y el vaivén de tu cuna.

Yo soy el único camino y el indeseado;
Guié tus primeros pasos; te he acompañado
Desde que tus ojos se abrieron por vez primera,
Y estaré cuando los cierres por última vez.

Yo soy el tiempo que se va para no volver:
El tiempo perdido, el tiempo ganado, la vida
Que corre, el tránsito… pero tiempo, al fin y al cabo:
Tiempo huido en el afluente donde yo soy mar.

Yo soy el final de una partida de ajedrez,
Y aun así, estoy presente en toda tu partida,
Apartado, sin necesidad de intervenir:
Sin ser peón, rey, o jugador, yo decido.

Yo soy tu obstáculo y tu éxito; cada momento,
Cada segundo, cada idea, cada romance,
Cada acción e impulso definitivo te acerca
Un poco más hacia mí sin llegarte a dar cuenta.

Yo soy aquello de lo que tanto habéis hablado,
Eso mismo que tanto os repugna, de lo que
Huís sin saber que, de mí, no se puede huir:
Por más lejos que estéis, mía es siempre la ventaja.

Yo soy el último muro, tu fiel compañera,
Siempre presente: sin irme, sin abandonarte,
Más fuerte que cualquier fe, mi Muerte, porque a mí
No hay signo en el mundo que pueda vencerme.



Jaque Mate. 

*Título, subtítulo e imagen escogidos por David Casanova Rodríguez